La comunicación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible para “no dejar a nadie atrás”
Los avances hacia la Agenda 2030, así como el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) han sido lentos. En septiembre de 2015, varios líderes mundiales adoptaron un conjunto de objetivos globales para erradicar la pobreza, proteger al planeta y asegurar la prosperidad de todos. Este año, la pandemia causó grandes estragos en materia sanitaria, social y económica, lo que ha retrasado aún más la implementación de dichos objetivos. ¿Por qué el progreso ha sido tardío?
SOBRE EL EVENTO
Contexto y Objetivo

La Coordinadora de Comunicaciones de Cepei, Alexandra Roldán, fue invitada a participar en el X Congreso de Relaciones Internacionales de la Universidad de La Plata de Argentina donde conversó acerca del papel de la comunicación en la implementación exitosa de la Agenda 2030 sobre desarrollo sostenible, y los retos que enfrentan los comunicadores a la hora de generar campañas de difusión y sensibilización sobre esta.
CONTRIBUCIÓN DE CEPEI
Para la Coordinadora de Comunicaciones de Cepei, la comunicación es un requisito indispensable para el desarrollo sostenible: “Las comunicaciones juegan un rol fundamental a la hora de cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible a 2030 porque tienen la capacidad de mover a la acción y sensibilizar, es decir, hacer un llamado a todos los actores de la sociedad a formular políticas para que “nadie se quede atrás”.

PUNTOS PRINCIPALES DE LA INTERVENCIÓN
De acuerdo con Roldán, quienes comunican la Agenda 2030 y los ODS, se ven llamados a: forjar alianzas y reconocer la importancia del apoyo multiactor; generar concientización y comunicar los progresos de la implementación a través de mensajes claros y accesibles; entender los contextos y realidades individuales, evitando un enfoque estándar de las comunicaciones; involucrar a la juventud; hacer uso efectivo de las nuevas tecnologías -como Tableau, Mapbox, y Story Map de Esri-, e innovar en la presentación de resultados, por ejemplo, a través de historias con datos, infografías, tableros de control, visualizaciones dinámicas; y, finalmente, reconocer el mandato directo de la Agenda: “La Agenda 2030 es de las personas, por las personas y para las personas”.
Para Roldán, solo cuando entendemos y damos prioridad a la Agenda y a los Objetivos, los comunicadores podremos crear conciencia, generar conocimiento e inspirar a las personas a creer y luchar por el desarrollo sostenible.
Frente al uso de las historias o narrativas con datos para comunicar los ODS, nuestra Coordinadora de Comunicaciones afirma que: “las organizaciones de la sociedad civil estamos llamadas a comprender que es posible construir nuevos mundos a través de los datos. Pero para esto es importante humanizar el dato, visibilizar las problemáticas e informar qué se está haciendo para superarlas.
La Agenda 2030 nos afecta a todos en nuestra cotidianidad, y esto es algo que aún no hemos logrado comunicar de manera efectiva: todavía existen desafíos para hacer que los ODS sean más fáciles de entender para las personas. Entonces es un hecho que esta exposición diaria a los Agenda 2030 no está ocurriendo para la mayoría de las personas y las partes interesadas y esto incrementa la desconexión.
Las comunicaciones deben convertirse en una prioridad estratégica en la implementación de los ODS: y ahí el rol de los comunicadores es incentivar a que se incorpore la Agenda en las estrategias de comunicación nacionales y territoriales y en los programas de educación, así como en las estrategias de organizaciones no gubernamentales.

“Las herramientas de comunicación y sensibilización facilitan que las personas se relacionen con los ODS, porque descomplejizan el lenguaje de la Agenda, la hacen más cercana, despiertan el sentido de pertenencia frente a esta y llaman a la acción”.