Estadísticas: el poder de los datos para cambiar vidas

octubre 20, 2020

Fredy Rodríguez y Margarita Vaca
Cepei 

f.rodriguez@cepei.orgm.vaca@cepei.org 

20 de octubre de 2020


 ¿Qué son las estadísticas? ¿Para qué sirven?

En general, las estadísticas son asociadas con cifras y procesos metodológicos. Sin embargo, estas van mucho más allá, al ser un instrumento fundamental para la planeación y desarrollo económico, social y político de cualquier territorio. Las estadísticas se convierten en insumos esenciales para la toma de decisiones en múltiples aspectos, entre ellos la asignación de presupuestos y la creación de programas sociales; por ejemplo, la aprobación de programas de alimentación escolar que respondan al bienestar de los estudiantes, y eviten la deserción escolar y problemas de salud.

A partir de 2015, cada cinco años, el 20 de octubre se celebra el Día mundial de la Estadística que busca reconocer la importancia de las estadísticas en la conformación de nuestras sociedades y el poder de los datos para mejorar vidas. Por ello, cada país cuenta con un Sistema Nacional de Estadística que busca fortalecer la producción de estadísticas nacionales que garanticen su pertinencia, oportunidad y calidad en la toma decisiones. 

¿Cuáles son los diez principios fundamentales de las estadísticas oficiales?

La Comisión de Estadística de las Naciones Unidas adoptó los principios fundamentales de las estadísticas oficiales en 1994 a nivel mundial. En 2014, fueron adoptados por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Esta reconoce el valor esencial de las estadísticas oficiales para el desarrollo nacional e internacional, la necesidad de información de calidad para el análisis y adopción de normativas robustas para el desarrollo sostenible, la paz y la seguridad. Asimismo, destaca la importancia del acceso a la información por parte de cada ciudadano para la toma decisiones individual y colectiva.

Fuente: Naciones Unidas, 2014

.

Información estadística que nos ha dejado el 2020

  1. 7.674 millones de personas viven en el mundo, de las cuales el 62,25% se encuentra entre los 15 y 74 años (Banco Mundial, 2020)
  2. Más de un millón de personas han muerto debido a la pandemia (Institute Johns Hopkins, 2020)
  3. A septiembre de 2020, cerca de 579 millones de niños en edad escolar siguen afectados por el cierre de las escuelas y se enfrentan a la realidad de la educación a distancia (UNESCO, 2020)
  4. Alrededor de 2.000 millones de trabajadores en todo el mundo están empleados de manera informal, lo que representa el 61% de la fuerza de trabajo mundial (OIT, 2020)
  5. Durante el segundo trimestre, la disminución de la cantidad de horas de trabajo a escala mundial fue 14% equivalente a 400 millones de empleos a tiempo completo (OIT, 2020)
  6. Se prevé una disminución del volumen del comercio mundial de mercancías del 9,2% en 2020 (OMC, 2020)
  7. Se prevé un crecimiento del PIB mundial de -4,4% en 2020 y 5,2% en 2021 (FMI, 2020)
  8. Durante el primer trimestre, las llegadas de turistas internacionales cayeron un 65% en comparación con 2019, es decir, 440 millones de llegadas internacionales y 460 mil millones de dólares estadounidenses en ingresos por exportaciones del turismo internacional (OMT, 2020)
  9. En el cuatrimestre, las emisiones globales de CO2 fósil decrecieron 7,8% (Cornell University, 2020)
  10. Entre el primer y segundo trimestre de 2020, el uso de soluciones de teletrabajo aumentó un 324%. Las aplicaciones de teletrabajo incluyen: zoom.us, meet.google.com, teams.microsoft.com, webex.com, y slack.com (CEPAL, 2020)

Retos de las estadísticas oficiales

Sin duda, las estadísticas nos permiten comprender las dinámicas sociales y formular políticas públicas que respondan a las necesidades de las personas y aseguren la igualdad de oportunidades para desarrollar su capacidades tanto en el presente como en el futuro. No obstante, la dinámica global, los avances tecnológicos y la necesidad de información para dar respuestas en tiempo real presentan retos significativos a la producción estadística.

  • Datos oportunos y desagregados: la pandemia ha resaltado la necesidad de contar con estadísticas actualizadas y en tiempo real tanto para todos los territorios como para todos los grupos poblaciones a fin de contar con insumos suficientes para la toma de decisiones rápida, pero justificada.
  • Fuente de datos no tradicionales: la incorporación de fuentes de datos no tradicionales que permitan tanto complementar las estadísticas oficiales como medir vacíos o temáticas que aún no hayan sido abordadas a través de marcos de calidad y procesos de rigor estadístico. Las fuentes de datos no tradicionales como imágenes satelitales o big data permiten reducir los costos, tener mayor desagregación de datos y una mejor oportunidad de la información.
  • Calidad: la estadística oficial debe considerar los atributos de calidad requeridos para contar con estadísticas sólidas y confiables para la toma de decisiones. La pertinencia, precisión, oportunidad y accesibilidad son esenciales para la consolidación del proceso estadístico adecuado.
  • Imparcialidad e independencia: los productores de información oficial, en especial las Oficinas Nacionales de Estadística, deben contar con plena independencia técnica para el desarrollo de estadísticas. Existe la necesidad de tener leyes estadísticas o mecanismos legislativos actualizados que brinden una fortaleza institucional para producir información de calidad.

Caso: Terremoto de Ecuador 2016 y políticas públicas

Fuente: The New York Times

La estadística ha permitido tomar decisiones de política pública para responder a eventos inesperados. Un ejemplo, es el rol que ejercen las Oficinas Nacionales de Estadística y otros actores de gobierno para identificar y caracterizar situaciones de desastres naturales. El caso del terremoto de Ecuador en 2016 que afectó seis provincias y donde el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) del país identificó la necesidad de contar con estadísticas que evaluaran el impacto del desastre.

El INEC inició el operativo de campo un mes después del terremoto buscando respuesta a tres elementos principales: 1) daños, 2) pérdidas y 3) costos adicionales, aportando su experiencia técnica en el levantamiento, procesamiento y análisis de información. Los resultados permitieron identificar pérdidas materiales de la población y económicas de varios sectores económicos para ser abordados por los tomadores de decisiones locales y nacionales. 

La encuesta que resultó del operativo, además de ser la base de datos de las personas afectadas por este desastre natural, se convirtió en el punto de partida para el Registro Único de Damnificados. Esta información se entregó al Ministerio Coordinador de Desarrollo Social para apoyar la focalización de entrega de beneficios, como bonos de arriendo, para las personas que habían perdido la vivienda. Fuente: INEC, 2017, Reconstruyendo las cifras luego del sismo

.

Share This